Amigos;
Cuanta alegría nos causan aquellos a quienes amamos, mientras pequeños nuestros hijos sentimos que podemos protegerlos de todo, cuando crecen tendrán que aprender solos unas veces riendo y otras llorando.
Por mucho que sigamos protegiendoles igual tendrán que vivir sus propias batallas y aprender a vencerlas!
Pidamos sabiduría a Dios! que todo lo puede y el aumentara nuestra paciencia para poder lograrlo.
Abrazos,
Rita Maria
No hay comentarios:
Publicar un comentario