Querido Lectores:
Hay algo mágico dentro de cada uno de nosotros y esto es nuestro niño interior!
Nuestro niño interior todo lo cree, todo lo espera, siempre ama y perdona, siempre desea jugar después de una caída así haya llorado y le haya dolido la misma, nunca pierde las ganas de volver a empezar, explorar, aprender, reír y compartir.
Si amigos, Dios nos creo con eternidad dentro de cada uno, es por eso que debemos entender y defender nuestro niño interior, solo así podremos siempre volver a empezar aun después del dolor, con el entusiasmo de un niño y querer ser feliz.
Cuando hemos sido profundamente atacados y heridos por otros, nuestro ser interior forma todo tipo de mecanismos de defensa con el objetivo de no solo soportarlo sino superarlo. El problema radica en que la mayoría de las ocasiones quedamos atrapados dentro de las mismas paredes y barreras que levantamos como protección, las mismas que mañana no nos permiten volver a intentar de verdad en una segunda oportunidad.
Primero es importante entender y aceptar que este fenómeno esta ocurriendo en nuestro interior para decidir buscar la ayuda necesaria, volviendo a la carrera de manera efectiva esta vez, es decir aprender a cruzar la calle.
Cruzar la calle significa en mi experiencia personal, dejar ir por completo lo pesado y negativo de nuestro pasado y a las personas que nos causaron daño a nosotros, nuestros hijos, familiares y terceros involucrados, despojarnos de estas graves faltas y daños que en ese momento consideramos irreparables y causaron a nuestro psiquis tal shock que nos detuvieron de continuar viviendo saludablemente.
Por años escuche hablar sobre el perdonar a quien causo conmociones emocionales graves contra ti, a decir verdad aun creí que había perdonado de manera efectiva, hasta que pude entender dos cosas relevantes sobre esto:
1ro- Dios es capaz de sanarnos de mil y una maneras nuestros corazones heridos y darnos la segunda oportunidad tan anhelada. Esto no significa si fuera necesario de ninguna manera, pre-juiciarnos místicamente en contra de buscar ayuda profesional como la de un terapeuta, psicólogo, psiquiatra, neurólogo y mas médicos, que sean necesarios para poder superarlo de manera definitiva.
2do- Debe haber la sincera necesidad y reconocimiento de querer volver a empezar por el bien propio y el bien de los involucrados como son nuestras nuevas parejas, hijos, padres, familiares y amigos.
Uno esta por buen camino cuando se han dado todos los elementos mencionados, finalmente nuestro corazón ha aceptado el hecho de que quien nos causo tamaño daño no puede, ni va a detener su vida en pos de devolvernos lo que nosotros consideramos nos quito y causo en forma alguna, por la simple razón de que dicha persona, o personas no tienen la capacidad de ser lo que no son, ni pueden dar lo que no tienen, sencillamente seguirán siendo quienes fueron y son.
Fuimos nosotros quienes permitimos que nos causaran el daño aludido, tomamos la mala decisión de no evaluar de forma profunda y responsable el carácter y compatibilidad del otro e incluido en nuestro universo.
Si dejamos de mentirnos y excusarnos, aceptaremos el hecho de que nosotros dimos la autoridad que nos les correspondía y terminamos dañados, proseguiremos entonces a enfocarnos en no hay error que Dios no pueda enderezar y podremos elegir que EL tome control de nuestra verdadera sanidad interior. Dejaremos de seguir aferrándonos a nuestras falsas o propias expectativas de lo moralmente correcto, en lo que hubiéramos querido que hagan,sientan, y sean estas personas que ahora podemos darnos cuenta, eran y son absolutamente opuestas y diferentes a nosotros, y las podremos soltar saludablemente para seguir con nuestras vidas mas sanas y contentas.
Su palabra lo establece de esta manera:
NO CON FUERZA, NI CON EJERCITO O ESPADA , SINO CON EL ESPÍRITU SANTO DE DIOS!
PORQUE DIOS PONE EL QUERER COMO EL HACER EN EL CORAZÓN DEL HOMBRE!
Entonces queridos Lectores, demos gracias a Dios si hemos sido protagonistas de este proceso o si estamos en medio de uno, porque Dios NO DEJARA A MEDIAS SU BUENA OBRA QUE HA COMENZADO EN NOSOTROS, SINO QUE LA PERFECCIONARA Y TERMINARA HASTA EL DÍA QUE VENGA JESUCRISTO POR SU IGLESIA
Dispongámonos entonces con gozo y esperanza profunda a cooperar con EL y entremos en este proceso llamado: CRUZANDO LA CALLE!!!
Cuando cruzamos la calle físicamente lo que primero hacemos los seres humanos es mirar en ambas direcciones para evitar un desastre y guardar nuestra vida de cualquier posible accidente, lo mismo significa el hacerlo en la vida real, entremos en proceso responsable e inteligente de soltar nuestros pesados pasados que no nos permitían cruzar la acera y corramos finalmente aliviados hacia un futuro mejor.
Adelante!!! cada uno de nosotros, cuidemos nuestro feliz niño interior y demos gracias a Dios por lo que nos depara en nuestros horizontes.
Su voluntad al crearnos es, ha sido y sera que traigamos el reino de los Cielos a esta tierra sobre todas las áreas de nuestras vidas diarias, completamente cubiertos, provistos y protegidos como un niño confiado en el buen cuidado de sus padres.
La palabra de Dios establece que el Reino de los Cielos significan:
GOZO, PAZ, JUSTICIA Y SEGURIDAD, todo el tiempo sobre cada uno de nosotros diariamente.
Con el cariño de siempre,
Rita Maria
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